12 ene 2010

Amistad - 34º Capitulo

El pequeño lobo

Pasaron los días y veía cada vez menos a jake, lo mismo le pasaba a vivi, quien no podía ver a Daniel, este nuevo enfrentamiento entre los vampiros los había dejado mas alertas que nunca. Estaba en mi cama escuchando música y pensando en que me deparaba el destino cuando siento que tocan a mi ventana, era jake, le abrí y entro, le siguió Daniel – hola – les dije a los dos, jake me abrazo y Daniel levanto su mano en un gesto de saludo, no hablamos mucho, solo fuimos directo al grano, buscar a vivi, salimos toda la tarde, estuvimos por el parque, pasando el tiempo, parecía como si le hubiese vuelto el alma al cuerpo a vivi, se la notaba tan feliz de estar con Daniel, y poder acurrucarse en su cuerpo, yo solo estaba sentado al lado de jake, pero con la mirada nos decíamos todo. Se hizo la noche y se tuvieron que ir, a descansar, ya que no les tocaba vigilar la zona, Daniel llevo a vivi a su casa y jake me acompaño a mi, al llegar el comenzó a recorrer mi habitación con la mirada – te tienes que ir verdad – le pregunte con voz débil, el me miro y asintió – pero pronto nos volveremos a ver – en ese momento me tire sobre sus brazos, nos abrazamos un buen rato ya que Daniel comenzó a tirar piedras a mi ventana, se tenia que ir, me dio un beso calido en mis labios y se fue.

P.O.V Daniel:

El echo de enterarme de que no era yo el macho alfa, y de que podía haber pasado todos estos años con mi familia me había echo enfadar mucho con Juan, pero todo eso se disipo cuando conocí a vivi, ella cambio mi forma de ver esta vida, estoy agradecido de estar con ella, es una mujer grandiosa, a la cual protegeré a costa de mi vida. Siempre supe lo de jake y sentía algo de celos cuando el ingreso a la manada, y como le prestaba atención Juan, ya no era su preferido, no tampoco de los lobos mas grandes, pero lo entendía, mi vida siempre estuvo ligada al entrenamiento, y a saber la verdad desde un comienzo, y ahora me encomendaron una misión, la cual es encontrar a un chico que será el próximo licántropo en prepararse, además pronto se despertara ese sentido en el, ya que los chupasangre están por la zona, su nombre es Facundo, tiene 16 años y es mi deber entrenarlo, pensé que lo haría con jake, pero no, al ser el un macho alfa debe quedarse con los demás, además Juan me dijo, esto es exclusivamente tuyo, te debes encargar de la situación, así fue como salí al día siguiente de ver a vivi, pero antes tenia que pasar por su casa.

Cuando llegue me recibió con un gran abrazo pero su cara de felicidad al verme, cambio cuando le dije la misión que me habían encomendado, ella comenzó a gritar que eso lo debería hacer jake y no yo, le explique como eran las cosas, y me despide, con una lagrima de ella sobre mi dedo, me partía el alma verla sufrir de ese modo, pero tenia que ser de esa manera. Llegue al colegio de Facundo, ahí estaba el con sus compañeros, ni bien salio lo seguí, aparentemente se percato de mi presencia y comenzó a caminar mas rápido, yo también acelere el paso, cuando estuve cerca de el se dio vuelta – que es lo que quieres – me dijo con una mirada desafiante, aparentemente algo en el ya se estaba despertando – tranquilo muchacho solo quiero hablar contigo – de pronto apareció otro de los grandes lideres de las manadas, era Javier – muchachito es hora de que sepas lo que te va a suceder – Facundo nos miraba con cara de confundido – que haces acá Javier – el me miro – vine porque estaba seguro de que no serias capaz de hacerle frente a este niño – Facundo grito - yo ya no soy ningún niño – y se puedo ver el fuego en sus ojos, lo mismo que había sucedido con jake en su primera transformación o en sus arranques.

Niño tranquilo – le dijo Javier a facundo, pero este parecía no oírlo, se lanzo contra el y lo miro de manera desafiante, Javier no retrocedió, lo levanto en el aire y lo tiro - haber si esos poderes pronto salen a la luz niño, te necesitamos – facundo cayo en el suelo y se quejo de dolor, Javier se dio media vuelta y se fue, yo me acerque a facundo y lo ayude a levantarse – que es lo que quieren – pregunto el, aun con su mirada y tono desafiante, parecía que no le había afectado demasiado el echo de que Javier lo tirara – es algo que te explicare en el camino a tu casa, vámonos – así fue como ambos llegamos a su casa, el entro y tomo un poco de agua, yo lo esperaba afuera, a los diez minutos salio ya cambiado – no quiero que hablemos acá, vámonos a otro lugar – asentí con la cabeza y nos fuimos del lugar hacia el parque. Nos sentamos y le comencé a explicar lo que le iba a suceder, su rostro mostraba algo de excitación y miedo a la vez, sabia a lo que se iba a enfrentar, y porque motivo se despertaba eso en el, porque vampiros estaban por la zona – pero porque a mi – lo mire y me reí – es que algo de la sangre de los lobos tienes tu, esta en tus genes, no se si alguien de tu familia esta conectado con nosotros – el miro hacia abajo – entonces es hora de que mi vida cambie y deje todo atrás – pregunto el, le puse una mano en su hombro – tranquilo, podrás seguir viendo a tus seres queridos, y se que ellos podrán entender lo que te sucede, es mas alguno debe saber, nada mas que no esperaba que se despertara justamente en ti, y ahora – el se levanto – entonces tengo que decírselo a mis padres, y podremos irnos – de pronto apareció de detrás de un árbol Javier – pero miren al niño, esta decidido a hacerlo, pensé que no lo harías, pero me has sorprendido Daniel – me levante y le hice seña a facundo para que nos fuéramos – ya nos volveremos a ver niño – grito Javier, mientras nosotros caminábamos hacia la casa de facundo, tardo varias horas debo confesar, ya que se ve que le costo el echo de explicarles, estaba algo nervioso, por el echo de que sus padres no entendieran la situación, cuando se abrió la puerta y salio facundo con un bolso y su madre lo abrazaba – por favor, no dejes de visitarnos – el se alejo de ella – no te preocupes lo haré – se dio vuelta y me miro – ya nos podemos ir – me dijo y comenzó a caminar, yo mire a la madre que no dejaba de llorar, me acerque a el – se que esto es difícil, pero te toco a ti – el caminaba mas rápido y por su mejilla corrían lagrimas, era doloroso saber que se tenia que alejar de su familia de un día para otro, pero el sabia bien lo que hacia, acepto esa misión, y eso era bueno para todos nosotros.

Cumplí con mi misión y así fue como me dejaron ver a vivi aunque sea un rato, ya que de ahora en mas tendría que estar mas con la manada, y atento por si aparecía un chupasangre, así es mi vida, esto es lo que elegí y ahora que lo pienso, no lo cambiaria, por nada del mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario